Siempre se ha insistido en que la tecnologÃa es neutra y, por ello, puede usarse a favor o en contra. El quishing es un excelente ejemplo.
¿O es que acaso puede pensarse en algo más inocentes y útiles que los códigos QRs? Bueno, no son tan inofensivos después de todo.Â
Parte del éxito de los ciberdelincuentes depende una permanente innovación. También el aprovechar tecnologÃas de uso cotidiano o para hacerlas maliciosas.Â
La más reciente transmutación de este tipo es la que está experimentando con el código QR y los ataques de su modalidad maliciosa o quishing.Â
Los investigadores de Harmony Email han descubierto una nueva campaña, en la que el código QR no está en una imagen, sino que se crea mediante HTML y caracteres ASCII.Â
A finales de mayo se detectaron más de 600 correos electrónicos que seguÃan este patrón. Quedo documentado, entonces, el primer gran ataque de quishing.Â
Estos ataques se diferencian de los de phishing tradicionales en la forma en que se formatea el enlace en un correo electrónico.
En lugar de un enlace basado en texto, el sitio web malicioso se señala mediante un código QR. Cuando un usuario escanea el código QR, su dispositivo puede extraer el enlace indicado y llevar al usuario a esa URL.Â
A partir de allÃ, comenzaron con solicitudes de autenticación MFA estándar y posteriormente, evolucionaron hacia el ataque de routing y objetivos personalizados.Â
Ahora, hay una nueva tendencia hacia la manipulación de códigos QR.
Los ciberdelincuentes están insertando pequeños fragmentos de código en el HTML. A simple vista, en un email, esto podrÃa parecer un código QR estándar, pero para un OCR, no se detecta ninguna información relevante.
Evolución del quishing
Todas las formas de ataque evolucionan y el phishing de código QR no es diferente. Sin embargo, es único que la evolución se haya producido tan rápidamente.Â
1.- Comenzó con códigos de verificación MFA estándar; eran bastante sencillos y pedÃan a los usuarios que escanearan un código, ya fuera para restablecer la MFA o incluso para consultar datos financieros.
2.- La segunda variante, QR Code Phishing 2.0, eran ataques de routing. El enlace busca dónde está interactuando el usuario con él y se ajusta.Â
Si el internauta está en un Mac, aparece un enlace, si por el contrario cuenta con un teléfono Android, aparece otro.Â
También se han detectado campañas de códigos QR personalizados, en las que los ciberdelincuentes introducen el logotipo de la empresa y el nombre de usuario correcto de forma dinámica.
3.- Ahora, estamos viendo el Código QR 3.0, que es la representación de uno basada en texto. Esto hace que sea extremadamente difÃcil para los sistemas OCR verlo y detectarlo.
¿Cómo protegerse de estos ataques?
Para protegerse frente a estas amenazas, las empresas y profesionales de la seguridad deben tomar las siguientes medidas:
- Implantar una seguridad que descodifique automáticamente los códigos QR incrustados en los correos electrónicos y analice las URL en busca de contenido malicioso.
- Utilizar seguridad que reescriba el código QR incrustado en el cuerpo del email y lo sustituya por un enlace seguro y reescrito.
- Implementar seguridad que utilice IA avanzada para buscar múltiples indicadores de phishing.
Check Point Harmony Email and Collaboration ofrece una sólida protección antiphishing, incluidos los ataques de quishing.