La idea de Zuckerberg de casar a su red de microblogs, Threads, de Instagram parecía una genialidad.
Pero, como la espuma de la cerveza, creció rápidamente para, luego, comenzar a desvanecerse.
Con información de Snoop Consulting
Es un hecho innegable que Elon Musk es un hombre con buena suerte. Porque la debacle de Twitter que muchos sentenciaron debido al surgimiento de Threads parece haber quedado suspendida hasta nuevo aviso.
Hay que reconocer que el señor Mark Zuckerberg – como es su costumbre – jugó duro al montar su red de microbloging en los hombros de la exitosa Instagram. Funcionó.
Parecía que el tique Midas de Zuckerberg había vuelto y que su nueva idea iba a igualar a ChatGPT en su adopción meteórica:
La red social Threads reunió la asombrosa cantidad de 100 millones de usuarios en su primera semana de funcionamiento. Sin embargo, la cifra no parece ser sostenida en el tiempo.
Hoy ha quedado claro que el crecimiento vertiginoso de la nueva red social de Zuckerberg no superó el “crecer como la espuma de cerveza”.
De hecho, la naciente red enfrenta una muy notable tasa de abandono por parte de los usuarios del nuevo colectivo: un informe de la agencia Reuters confirma que más de la mitad ya han abandonado la aplicación.
El mismo informe relata que la alta tasa de deserción no parece preocupar a Zuckerberg.
Según la agencia, el creador de Facebook considera esta “mortalidad” natural en una nueva red y ya prepara nuevas funciones y “ganchos”.
Esa audiencia silente
Lo cierto es que tanto Zuckerberg como Musk han aprendido ya que es más fácil atraer usuarios que conservarlos.
Otro tanto ocurre con:
- La credibilidad de la red
- El número de conversaciones
- La calidad de las mismas)
- Y, por supuesto, los anunciantes
Más allá de que Zuckerberg tiene razón y que las startups tecnológicas suelen tener números vertiginosos, lo ocurrido con Threads no debería sorprender a nadie.
Una de sus fortalezas pero, también, de sus debilidades es que se puede “mirar” la conversación sin ser usuario, consultando desde los navegadores web.
Al salir al mercado sin esa facilidad, el señor del libro de caras dio muestras claras de no entender al rival al que está encarando en esta ocasión.
El CEO de Snoop Consulting nos recordó algo importante: en el mundo de las redes sociales, los números son relativos.
“Si lo vemos desde un panorama más general 100 millones parece un número enorme. Pero la realidad es que la base de usuarios que tiene Instagram, Facebook o Youtube ronda incluso más de los 2.000 millones. Visto de esa forma lo de Threads es apenas un pequeño porcentaje”, expresó el líder de Snoop, Gustavo Guaragna.
¿Threads vs. X? Entre genios te veas
El líder de Snoop Consulting destacó además que, lo que realmente importa en el panorama de las redes sociales es el número de usuarios activos y comprometidos.
“Aquí es donde Threads necesita enfocarse para asegurar su futuro. Comparando con otras plataformas, se hace evidente que la clave está en mantener a la audiencia interesada y participativa. La lección es clara: no se trata solo de acumular usuarios, sino de fomentar la participación y la conexión genuina con la comunidad”, puntualizó Gustavo Guaragna.
En esto coincidió el investigador de la Sociedad del conocimiento de la Universidad Católica Andrés Bello, quien afirmó en una consulta por correo que:
“Lo que hizo posible que las comunidades en el entorno digital se estructuraran para dar paso a lo que hoy conocemos como redes sociales fue el microbloging. Este es un principio de diseño del HTML que permite responder al autor en el mismo documento HTML con un mismo URL”, explicó el especialista en entornos digitales de la UCAB, Carlos Delgado Flores.
Esto deja muy claro la importancia de Twitter… aunque ahora se llame X.
Es algo que ya han descubierto los señores Zukemberg y Musk: lograr que una red social se convierta en un espacio público relevante requiere más que recursos y ganas.
Por lo visto, es mucho más fácil hacer dînero.