Las lecciones aprendidas a partir de la Ćŗltima recesiĆ³n pueden ayudar a las Ć”reas de cobranza, pero hay diferencias importantes que deben considerarse.
Por: Alexandre Graff, Presidente de FICO en AmƩrica Latina y Caribe.
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Debemos aprender del pasado, por lo que considero que deberĆamos analizar que existen mĆ”s similitudes con el desplome financiero en MĆ©xico del 2008 de las que creemos. Revisando el panorama general de la situaciĆ³n y las proyecciones de los especialistas analicemos los retos a enfrentar en torno a la cobranza de deudas y el COVID-19.
En AmĆ©rica Latina y Caribe, las cifras continĆŗan aumentando: actualmente hay cerca de 546,000 casos confirmados de Covid-19 y se han registrado mĆ”s de 30,000 muertes. En MĆ©xico tenemos mĆ”s de 56,000 casos confirmados y mĆ”s de 6,000 muertes como consecuencia del COVID-19. Los hospitales estĆ”n por alcanzar su mĆ”xima capacidad.
SegĆŗn estimaciones de CI Banco, la contracciĆ³n econĆ³mica del PIB este aƱo serĆ” de 8Ā %, y el Banco de MĆ©xico estima que se han perdido 700.000 empleos formales derivados del impacto econĆ³mico del Coronavirus. Sin embargo, es importante recordar que MĆ©xico es un paĆs constituido principalmente por la pequeƱa y mediana industria, asĆ como por la economĆa informal. El sector privado estĆ” tomando decisiones y medidas, y las compaƱĆas estĆ”n respondiendo de forma muy positiva.
Goldman Sachs anticipa un crecimiento negativo de 3.8Ā %, mientras que la Unidad de Inteligencia de The Economist pronostica una caĆda de 4.8Ā %. Si estas cifras se confirmaran, serĆa la peor recesiĆ³n que haya padecido la regiĆ³n desde la Segunda Guerra Mundial. Bajo este contexto, se anticipa que la economĆa mexicana caerĆ” 4.3Ā %.
TambiĆ©n vemos en MĆ©xico un esfuerzo importante por parte del gobierno para otorgar crĆ©ditos a las microempresas, asĆ como por parte de las compaƱĆas grandes para apoyar a las micro y pequeƱas empresas.
Lecciones aprendidas
La crisis global del 2008 dejĆ³ claro que la desaceleraciĆ³n de Estados Unidos y la dependencia econĆ³mica de MĆ©xico contribuyeron a aumentar los efectos de Ć©sta. La caĆda del PIB de MĆ©xico en 2009 fue de -6.16%, mientras que en Estados Unidos fue de -3.45%. A esto se sumĆ³ el brote de la pandemia de influenza AH1N1 que afectĆ³ al paĆs.
MĆ©xico contaba con una regulaciĆ³n financiera restrictiva pero positiva, ya que no quebrĆ³ ninguna instituciĆ³n financiera por la crisis de ese momento.
La polĆtica fiscal que aplicĆ³ el gobierno en ese momento buscaba estimular el consumo y la inversiĆ³n al reducir impuestos con incrementos en el gasto pĆŗblico, recortes en tarifas elĆ©ctricas y descuento en las aportaciones al IMSS. En polĆtica monetaria, fue la primera vez que el Banco de MĆ©xico redujo la tasa de interĆ©s en casi 50%.
Dos aƱos antes del desplome, el regreso a un buen estado financiero era de 2.5 aƱos en promedio. Entonces, si un cliente se habĆa enviado a cobranza, pasado por todo el proceso de cobranza y recuperaciĆ³n y vendido a un comprador de deudas, transcurrĆan por lo general 2.5 aƱos a partir de su ingreso a cobranza hasta que el comprador de deudas pudiera establecer un hĆ”bito de pago rutinario con el cliente endeudado.
Dos aƱos despuĆ©s del 2008, ese periodo de regreso a un buen estado financiero se habĆa reducido a nueve meses. Esto debido a que los clientes que ingresaron a cobranza eran efectivamente buenos clientes, con un problema de pago a corto plazo. Eran clientes con un perfil de Ć©tica financiera muy diferente y pronto regresarĆan a trabajar y a generar ingresos, lo que les permitirĆa volver a un buen estado financiero.
Entonces, ĀæcuĆ”l es exactamente la diferencia con el COVID-19? Por desgracia, la escala de vulnerabilidad tanto a corto como a largo plazo parece ser mayor.
Planear para la siguiente etapa
Al dĆa de hoy, lo que estamos viendo es que el Ć”rea de operaciones estĆ” centrada en intentar manejar el aumento gigantesco en las llamadas de clientes, el cual se atribuye a los respectivos programas de ayuda y protecciĆ³n de ingresos en los diferentes mercados. Los acreedores se han estado esforzando por mantener la continuidad de los negocios a pesar de una disminuciĆ³n importante en su fuerza laboral y de los retos que implica que algunos trabajen desde casa.
Asimismo, es importante que los equipos se pregunten:
- ĀæQuĆ© necesito hacer hoy para asegurar que, en un futuro no muy lejano, estemos bien posicionados para manejar una cartera de cobranza mucho mĆ”s grande de la que pensĆ”bamos tener?
- ĀæY cĆ³mo podemos hacerlo sin ādesangrarā a los buenos clientes o generar un sentimiento negativo entre los mismos?
Estos dos factores por sĆ solos determinarĆ”n quĆ© tan rĆ”pido y quĆ© tan fuertes saldrĆ”n de la crisis los equipos de cobranza. Cabe seƱalar que aquellos que no tomen las medidas adecuadas hoy, seguirĆ”n culpando a la crisis mucho tiempo despuĆ©s de que haya terminado.
QuƩ hacer ahora
En FICO, recomendamos a nuestros clientes manejar los retos tanto inmediatos como a corto plazo:
- EnfĆ³quese en la interacciĆ³n digital con los clientes para asegurar la escalabilidad y un proceso sin fricciones, asĆ como para liberar la presiĆ³n de los empleados del centro de atenciĆ³n telefĆ³nica tradicional.
- Capture informaciĆ³n importante hoy que no habĆa considerado capturar en el pasado. Los ejecutivos de cobranza, riesgos y operaciones necesitarĆ”n contar con los datos que les ayuden a:
- Conocer las diferencias entre las deudas relacionadas con el COVID-19 y aquellas que no lo estƔn
- Identificar a los clientes a quienes aplicar analĆtica tradicional de riesgo de cobranza y aquellos para quienes es redundante
- Determinar la probabilidad de que un cliente regrese a un buen estado financiero a travƩs de datos, incluyendo:
- ĀæQuĆ© circunstancias provocaron su disminuciĆ³n de ingresos? Por ejemplo: ĀæLicencia sin sueldo? ĀæEnfermedad?
- ĀæCuĆ”l ha sido el verdadero impacto en los ingresos disponibles?
- ĀæCuĆ”l es su probable curva de regreso a un buen estado financiero de acuerdo con su dinĆ”mica familiar y sector de la industria?
Utilizar los datos
Cuando las cosas empiecen a normalizarse, aquellos que hayan capturado la informaciĆ³n para poder priorizar a quiĆ©n contactar y con quĆ© expectativas, tomarĆ”n la delantera. No podrĆ”n llamarlos a todos el primer dĆa, pero podrĆ”n evitar llamar a muchos clientes en el orden equivocado, lo que implicarĆa gastos y daƱarĆa la confianza que se ganĆ³ cuando brindaron la prĆ³rroga temporal solicitada por los clientes.
Mientras los equipos de cobranza, riesgo, estrategia y operaciones se aseguran de realizar la mejor segmentaciĆ³n posible con los datos actuales y los relacionados con el COVID-19 y ajustan estrategias como polĆticas de incumplimiento, el criterio de restructuraciĆ³n, etc., los equipos financieros deben observar quĆ© tan rĆ”pido se comenzarĆ” a recuperar cada industria y en quĆ© orden.
Esta informaciĆ³n tambiĆ©n serĆ” sumamente importante en otros aspectos del proceso de cobranza y recuperaciĆ³n:
- Equipos para fallecidos ā Se requerirĆ” un trato sensible hacia las personas que hayan heredado deudas pendientes. Esta es una prĆ”ctica normal, pero el volumen aumentarĆ”, de modo que no permita que la presiĆ³n laboral dĆ© lugar a prĆ”cticas errĆ³neas. Asimismo, habrĆ” muchas mĆ”s muertes inesperadas y deberĆ” tratar con personas afligidas que ni siquiera pudieron asistir al funeral de su ser querido.
- Equipos para insolvencia ā HabrĆ” un aumento significativo y estos equipos necesitarĆ”n evaluar a que protecciĆ³n tienen derecho estos dueƱos de PyMEs. La mayorĆa tendrĆ” que alejarse de su negocio para enfocarse en otras prioridades. SerĆ” mĆ”s un momento de entregar las llaves de su negocio, que intentar un Ćŗltimo recurso despuĆ©s de haber incurrido en deuda durante largo tiempo.
Los clientes esperarƔn tolerancia del acreedor, y el acreedor debe pedirla tambiƩn. Es mejor tomarse un tiempo y garantizar un buen resultado para ambas partes. Aquellos que nunca han estado en un proceso de cobranza serƔn los primeros en querer salir de Ʃl.