¿Cómo pasar de inteligente a productivo?

En estos días todo es “inteligente”. La gran mayoría de los sectores reconocen cómo los sistemas y productos conectados transformarán la forma en que operan y sobre todo, cómo incentivar la transformación significa mejorar.

Por: Rubén Belluomo, Gerente Comercial Cono Sur de Infor.

En manufactura, la tecnología basada en sensores permite un manejo masivo de datos contextuales que pueden aplicarse a muchas actividades disruptivas e innovadoras como en análisis predictivo, el mantenimiento automatizado y el aprendizaje digital. Pero, más allá de esta tendencia, la tecnología inteligente también cuenta con un gran poder para ocuparse de los fundamentos de la manufactura, como la productividad, eficiencia y el servicio al cliente.

Aunque la novedad es normalmente el foco de las conversaciones sobre tecnología digital y el Internet de las Cosas (IoT), la ganancia financiera no queda clara desde el comienzo. Sin embargo, la aplicación estratégica de tecnología inteligente y conectada puede lograr ganancias inmediatas, potenciar el ROI y ser la base para futuras mejoras.

• Ideas. La ganancia en productividad es uno de los resultados inmediatos que tiene el Internet de las Cosas.  El aumento de la productividad del personal es simple al brindar acceso a los empleados a los datos que necesitan para una mejor toma de decisiones, basándose en hechos reales y no en datos estimados e información desactualizada. Así, los ejecutivos pueden ser más estratégicos, los usuarios más eficientes y los distintos departamentos pueden ver como sus roles impactan en la productividad.
• Intervención. La tecnología inteligente también ayuda a optimizar los procesos de planta. Los sensores en las maquinarias permiten a los equipos de mantenimiento monitorear el estado de los equipos y automatizar el mantenimiento preventivo. Los sensores pueden monitorear los avisos tempranos de problemas y los envía al área de mantenimiento para su intervención y así disminuir el tiempo de paradas no programadas.
• Inventario. Al contar con los datos de las reparaciones y del mantenimiento, las empresas pueden predecir exactamente qué repuestos son necesarios, dónde y cuándo. Esto logra ahorros en los costos ya que las predicciones precisas eliminan contar con inventarios innecesarios.
• Trazabilidad. Los sensores y la trazabilidad con el GPS en el manejo de equipos y de flota en el almacén brinda un retorno de inversión casi inmediato. La ubicación precisa de los productos, las personas y  los vehículos es clave en los proyectos y el ahorro. Este tipo de datos mejora la precisión en el inventario y los envíos, y la trazabilidad de los vehículos de servicio y de entrega ayudan en el mapeo y predicción del horario de entrega.
• La inversión es conveniente. La tecnología inteligente está revolucionando todo, con muchas aplicaciones y beneficios que todavía deben lograrse. Las innovaciones disruptivas prometen ganancias y nuevas oportunidades, pero todavía faltan ser probadas. Estos éxitos a corto plazo serán la base y facilitarán las inversiones y mejoras a medida que la tecnología siga progresando. Para aquellos que integran el IoT en sus procesos, el desafío ahora es saber que la tecnología no será lo único “inteligente”.