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Aunque la relaciĆ³n de cooperaciĆ³n con la Interpol es muy activa y dista mucho de ser nueva, la firma rusa demuestra astucia en su estrategia de PR.
CIO AMĆRICA LATINA | Por Elibeth Eduardo | @ely_e
Luego de rechazar el racismo, la tortura y el terrorismo, no hay nada mĆ”s “polĆticamente correcto” en el mundo que combatir (activamente) el cibercrimen.
AsĆ que, si usted es una multinacional en cualquier vertical de industria, seguramente, le darĆ” gusto trabajar con una firma de seguridad que colabora con a Interpol para perseguir a sus enemigos.
Y este razonamiento no excluye de ningĆŗn modo a las empresas estadounidenses.
Al anunciar que estrecha sus vĆnculos con la policĆa del mundo, Kaspersky desafĆa al gobierno de Trump a que la vincule con prĆ”cticas delincuenciales.
Puesto que la actual administraciĆ³n se ha negado a recoger el guante de encarar a Kaspersky Lab frente al congreso mientras la empresa permite que hasta se revise su cĆ³digo, no le ha dejado a la firma rusa mĆ”s remedio que blindar su reputaciĆ³n
Ciertamente, el gobierno estadounidense no estĆ” en posiciĆ³n de seƱalar a la Interpol ni siquiera como negligente en cuanto al cibercrimen y otros delitos se refiere.
TouchƩ.
Juego Āæde espĆas o de tronos?
Lo cierto es que, mientras las investigaciones de empresas estadounidenses como Google, Twitter y Facebook apuntan a que las elecciones estadounidenses en las que resultĆ³ electo el actual mandatario fueron “intervenidas” mĆ”s a travĆ©s de la comunicaciĆ³n y publicidad en redes sociales que con “espionaje”, los voceros del gobierno de Trump insisten en el hackeo.
Y, mĆ”s pues no sĆ³lo han retirado los productos de Kaspersky Lab de las oficinas de las dependencias federales sino que tambiĆ©n han “sugerido” que las empresas estadounidenses hagan lo mismo.
Si la manipulaciĆ³n del gobierno ruso (antes amigo de Trump) no fuera tan evidente, seguro estarĆa respaldando un reclamo de la firma de ciberseguridad en la OMC.
La respuesta es digna de estudio. Esta visto que en esta guerra de relaciones pĆŗblicas con el que el gobierno de Trump intenta que olvidemos sus simpatĆas con el lĆder del gobierno ruso Kaspersky tal vez sea inocente.
Pero no es ingenua. Ni desvalida.
La Interpol tiene un aliado de primera que ya lo ha ayudado en la (muy activa) regiĆ³n de Asia-PacĆfico. Y eso son hechos demostrables.
El gobierno de Trump tendrĆ” que empezar a hacer lo mismo si quiere ser realmente convincente.
