Una pérdida del 6% en el cuarto trimestre sufrió la cotización de Amazon en los mercados, pérdida que preocupa a sus inversores.
Una de las empresas más importantes en el área del comercio electrónico no ha dado unos buenos pronósticos para el último trimestre del año, en el que los beneficios se estimaban alrededor de los 1.250 millones de dólares.
Por otro lado, los inversionistas esperaban unos 1.620 millones de dólares, lo que supone una cifra sensiblemente superior y que hace que las muestras de preocupación se hagan presentes. Muchos se preguntan cuál es el motivo de esta caída, más cuando se esperaban resultados por ventas en el orden de los 45.500 millones de dólares.
Las dudas sobre la reducción de beneficios se basan además, de los datos del tercer trimestre (Q3) que supuso el sexto seguido con beneficios, pero que se quedaron algo cortos respecto a lo esperado. Pero sobre todo por un pronóstico reducido del cuarto trimestre cuando AWS está viviendo un gran momento, con un crecimiento del 55% respecto al año pasado, así como un gran crecimiento en infraestructuras, con 18 nuevos almacenes en todo el mundo y un aumento del 38% de su plantilla, para prepararse antes las compras navideñas.
La explicación estaría en las grandes inversiones que Amazon está llevando a cabo a nivel mundial, tanto para mejorar la logística internacional como para la servicios de venta de comestibles en numerosas ciudades.
Amazon también está apostando fuertemente por sus servicios de suscripción de vídeo y música, y todo esto mermaría los beneficios, avisando además que la época de grandes márgenes de beneficio ha pasado, ante la gran competencia del sector.