El Proyecto Titán de Apple, que consistía en la construcción de un auto eléctrico ha sido desechado.
La compañía estadounidense tenía varios años trabajando en el proyecto del auto electrico con tecnología de autoconducción. La idea era construir un producto de Apple, en el que se tuviese el control absoluto, tanto del software como de los componentes de hardware y que pudiese estar en el mercado para el 2020.
El proyecto Titán, pretendía competir con Tesla y Uber, compañía que ya se encuentran trabajando en el tema de los vehículos autónomos. Apple podría estar trabajando en obtener lo mejor de ambas tecnologías, tanto el sistema eléctrico, como el hecho de que se tratase de vehículos autónomos.
Pero una serie de inconvenientes, entre ellos el no llegar a un acuerdo con un fabricante de vehículos, (se habló con la empresa McLaren), obligó a “congelar las posibilidades”. Es un hecho que el equipo que integraba el Proyecto Titán, fue reasignado a otros planes, y algunos han salido de la empresa, ya que no puede construir una maqueta prometedora antes de finales de 2017.
Los nuevos planes en Apple se concentran ahora en la tecnología de conducción autónoma. Para ello, planea asociarse con varios fabricantes de automóviles a la vez. De hecho se sabe de conversaciones con las empresas automovilísticas Ford, General Motors, Mitsubishi y Renault.
Este cambio tiene que ver con la asunción del liderazgo del proyecto por parte de Bob Mansfield. Este directivo de Apple pasó a dirigir el Proyecto Titán en julio y, es una de las principales razones por las que la compañía de Cupertino está cambiando su estrategia en lo que a automóviles se refiere.
Mansfield, señalan fuentes internas de Apple, nunca estuvo totalmente de acuerdo con el proyecto, debido a los altos costos y la falta de ciertos detalles en la infraestructura.