La certeza de que los smartwatches pueden comprometer los datos corporativos, o ser potencialmente riesgosos y poner en riesgo la seguridad empresarial en los lugares de trabajo, es un planteamiento que preocupa a diversos analistas del área.
CIO América Latina| Matt Hamblen| @matthamblen
Algunos empleados han comenzado a utilizar la conexión de sus smartwatches personales con las redes corporativas de Wi-Fi, lo que podría imitar los problemas causados cuando los teléfonos inteligentes personales empezaron a aparecer en el trabajo hace varios años.
“Es como llevar encima algún aparato de espionaje, y lo grave es que ya comienzan a inundar el lugar de trabajo, por lo que el riesgo para los empleadores podría empezar a parecerse a BYOD con esteroides“, dijo Peter Gillespie, un abogado de Fisher Phillips, una firma estadounidense de derecho laboral que representa a los empleadores.
Gillespie le preocupa que con el uso de los smartwatches se puedan hackear los correos electrónicos, o el software de productividad interna en algunos casos; “y de ser así los datos corporativos y personales vitales podrían perderse, robarse o podrían ser dañados”.
-El problema está empezando a ser conocido, a ser monitoreado por las personas que manejan seguridada y pocas empresas parecen entender los daños potenciales.
“A partir de ahora, llevar encima y dispositivos que pueden estar relacionados con el Internet de las cosas (IoT), y que no estén conectados a las redes de empleadores se convierte en un grave problema”, dijo Gillespie. “Pero creo que un empleador de TI y los departamentos de recursos humanos deberían estar conscientes de que el despliegue o mopda por utilizar estos aparatos no va en concordancia con la seguridad de los datos de la empresa, y no están preparados para enfrentarlos.”
Muchos smartwatches se conectan a través de un teléfono inteligente, o Bluetooth, pero algunos se están vendiendo con conectividad celular y pueden proporcionar la localización GPS de un usuario y otros datos. Si está conectado a un directorio corporativo, existe la posibilidad, aunque pequeña, de que tales datos pueden ser pirateados. O datos de salud y de la aptitud de un usuario pueden ser también robados o hackeados, dependiendo de cómo una empresa configura su seguridad de la red.
“Es muy difícil prever cómo la gente creativa puede obtener alrededor de tirar de los datos y hacer uso de ella … y si que se convierte en un problema”, añadió Gillespie.
IDC y PWC advierten del problema
Phil Hochmuth, analista de IDC, dijo que las empresas reconocen el derecho de llevar encima un werable, pero que debe tenerse en cuenta que la propiedad privada de las redes como un problema de seguridad potencial. “Ellos están buscando soluciones para salir adelante con esto, pero no a gran escala”.
Hasta ahora, por lo general sólo un puñado de trabajadores de una determinada empresa utilizará un portátil para tener acceso a correo electrónico o relaciones con los clientes, u otras herramientas de gestión como los disponibles de Salesforce, dijo Hochmuth. “Hasta el momento, las empresas no están implementando medidas para prevenir este tipo de elementos vestibles de manera amplia.”
“Un dispositivo como un reloj de Apple podría ser visto como un riesgo si el teléfono es de propiedad corporativa, pero el reloj no es.”
Por otra parte, empresas que se especializan en gestión de movilidad y fabricantes como Blackberry están creando un software que se aplica específicamente a los wereables y requieren de códigos de protección de acceso. Pero hasta ahora, los aumentos de la productividad a través de la utilización de smartwatches y otros wearables en la empresa no han prodido ser medidos o comprobados, lo que conlleva un nuevo riesgo para la seguridad, señaló Hochmuth.
Una encuesta en línea realizada a 1.000 residentes en Estados Unidos, en el mes de marzo por Pricewaterhouse Coopers International (PWC), dijo que “uno podría haber pensado que la privacidad sería el mayor obstáculo frente a la tecnología portátil hoy en día, pero resultó ser incierto, aunque las preocupaciones sobre la privacidad continúan incrementándose”.
La encuesta de PWC también encontró que el 67% de los consumidores dijo que la empresa donde labora debería pagarle por el uso de su portatil, en parte, con la expectativa de que dicho aparato podría ser utilizado para aumentar la productividad del lugar de trabajo.
Según el informe, 75 millones de personas utilizarán algún wereable en el lugar de trabajo, y cita a Gartner que para el año 2018, se requerirán unos 2 millones de empleados que usen para el año 2020 un dispositivo de seguimiento de la salud y la forma física como una condición de empleo.