El contratar un outsourcing es como jugar la lotería. Aquí no valen metodologías ágiles de desarrollo o software tradicionales que ayuden a contratar de manera adecuada lo que también se conoce como “acuerdo de externalización para un proveedor de TI”.
CIO| Stephany Obervy
“Bajo los enfoques de contratación tradicionales, existe la suposición de que el equipo de desarrollo puede definir, con alguna especificidad, dicha contratación, lo que se logrará con “el apoyo de un plan detallado del proyecto y los hitos clave vinculados a la aceptación del cliente y los factores desencadenantes de un sueldo o acuerdo económico,” dice Derek J. Schaffner, abogado de la firma Mayer Brown.
Shaffner asegura que no existen planes de proyectos detallados o hitos claves porque el cliente y el desarrollador evalúan continuamente y dan prioridad a las actividades con iteraciones cortas o sprints. “Un enfoque de desarrollo ágil de software requiere un salto de fe por parte del cliente que está acostumbrado a la formalidad y al control del desarrollo que posee un software tradicional.”
Sin embargo añade el abogado, “existen mecanismos contractuales que los clientes pueden implementar para reducir la incertidumbre, mientras que aprovecha las ventajas de este método de desarrollo de mayor colaboración.
CIO.com habló con Schaffer sobre cómo implementar agilidad y la protección debida en los contratos de outsourcing para contar con el servicio del personal de TI que realmente se necesite
-¿Cuáles son los mayores retos en la elaboración de contratos para un personal outosurcing en TI?
-Un enfoque de desarrollo ágil de software hace hincapié en las interacciones no estructuradas y continuas entre el cliente y el desarrollador de TI basados en la confianza y el entendimiento, que son difíciles de estampar también en un contrato. Los mayores desafíos implican la creación de un marco para aprovechar las ventajas creativas y equilibrar la necesidad del cliente para tener el software incorporado de manera oportuna y a un precio justo.
-¿Cómo debe el cliente desarrollare una oferta para un futuro contrato de un outsourcing en TI?
– El desarrollo de un software TEA es el proceso más natural que se ajusta a un modelo de tiempo y materiales (T & M), Después de todo, y como ya lo dije, el contrato tiene una alta dosis de buena fe, ya que no hay un modelo de precios que motiva a los desarrolladores para cargar tantas horas como sea posible. Es ahí donde la buena fe tiene un peso enorme.
Hay variaciones del modelo T & M que pueden ayudar a controlar los costos, tales como cubiertas de T & M en una base de iteración o proyecto; una “retención” para cada iteración que se acumula, pero no se paga al desarrollador hasta que todo el proyecto se haya completado, y un monto que se acumula de horas de desarrollo pagadas sobre una base fija que el cliente puede fijar o aceptar.
El modelo T & M es más aceptable debido a sus derechos de finalización más amigables para el cliente. Sin embargo, existe un gran riesgo aquí: una vez que el proyecto es lo suficientemente amplio o conlleva una larga duración de tiempo, el deseo del cliente para completar el proyecto es mayor que la flexibilidad para dejar dicho proyecto. Esto podría crear una situación para la que el promotor agobia el cliente hacia el final de ese proyecto de desarrollo, a menos que exista un límite establecido con anterioridad en cuanto a los honorarios.
-¿Cómo lograr que la culminación del contrato no conlleve a situaciones de conflicto?
-Teniendo en cuenta que el objetivo de cada iteración es producir un código viable pagado sobre una base de T & M;el típico acuerdo de desarrollo ágil de software que permite al cliente contar con la culminación del proyecto al final de cada iteración.
Si el cliente no ve valor en el producto del trabajo producido durante la última iteración, puede simplemente dar por concluido el contrato.