Toyota Connected es el nombre de la compañía que esta empresa japonesa y Microsoft crearon para desarrollar un ecosistema donde los autos sean smartphones gigantes. Así será posible conducir, con un asistente virtual que sabe cuál es la mejor ruta a tomar, a quién avisar si el tráfico hará que llegues tarde a una reunión, cómo se comporta tu presión arterial mientras frenas y aceleras y qué restaurantes cercanos posiblemente te gusten.
La empresa sería el eje de la ciencia de datos del fabricante de automóviles nipón, quien busca conectar los vehículos con la vida diaria de las personas. Microsoft Azure será la plataforma de Cloud Computing que brindará una solución híbrida para todo lo que Toyota Connected cree, con el fin de que el manejo sea una actividad más personal, intuitiva y segura.
“Por largo tiempo hemos estado hablando del Big Data, pero ahora nos encontramos en un punto único de la historia en el que la tecnología está alcanzando lo que esperamos, al entregar nuevos servicios y capacidades dentro del vehículo”, dijo Zack Hicks, presidente y CEO de Toyota Connected.
La tecnología se está volviendo tan importante para los fabricantes de autos como lo es la ingeniería y el acero, así que la meta de Toyota con la nueva organización, ubicada en Plano, Texas, es expandir significativamente sus capacidades al apoyarse en su existente alianza con Microsoft.
La nueva empresa consolidará las iniciativas de Toyota en la gestión de centros de datos, analítica y desarrollo de servicios basados en datos bajo el mando de Hicks, quien también mantendrá su rol actual como CIO de Toyota Motor para Norteamérica.
“La industria automotriz está experimentando una transformación masiva pues los conductores ven cada vez más sus autos como dispositivos móviles que extienden su estilo de vida digital”, comentó Kurt DelBene, vicepresidente ejecutivo de Estrategia Corporativa y Planeación de Microsoft.
“Esto significa que ahora las personas se preocupan en la misma medida por el poder de cómputo de su coche que por sus caballos de fuerza. Así que estamos trabajando de cerca con los fabricantes de autos, incluyendo esta profunda asociación con Toyota, para hacer automóviles más inteligentes con sensores, pantallas, conectividad y vastas redes de datos que ayudarán a optimizar la experiencia del manejo en su conjunto”.
La compañía tiene el objetivo de atenuar la tecnología de modo que ésta no abrume a las personas dejándolas desconcertadas, encorvadas mirando su smartphone o la pantalla del auto, sino que sea inmersiva e intuitiva, y menos distractora para los conductores para que la seguridad sea mayor.