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El gobierno de China no da su brazo a torcer. No hay presión que la incomode, no oficial, ni de otro tipo. A pesar de las fuertes críticas del mundo empresarial, China seguirá manteniendo la censura en Internet, según se desprende de las palabras del director de la Comisión estatal de Reformas y Desarrollo (NDRC), Xu Shaoshi.
“Es necesaria una regulación de Internet”, afirmó Shaoshi, quien sostuvo que no comparte las quejas de las empresas de Estados Unidos y Europa sobre que la vigilancia en Internet perjudica el negocio en China, informó la agencia alemana de noticias, DPA.
El NDRC es el que da las directrices para la política ecónomica en el gigante asiático.
En los últimos tiempos empresas de Estados Unidos y Europa han lamentado las limitaciones en el acceso a Internet, obstáculos que consideran perjudiciales para sus negocios.
En enero, China amplió sus bloqueos a Internet con lo denominó “gran cortafuegos”, una medida que afecta sobre todo a los servicios de los denominados Virtual Private Network (VPN). A través de estas conexiones se había podido sortear hasta ahora parte de los bloqueos en la red impuestos por el gobierno de Pekín.
