Para finales del mes de marzo se espera que el satélite Inmarsat-5 F2 (I-5 F2) alcance su órbita geoestacional definitiva. Se sumará al servicio Global Xpress (GX), que habilitará el primer servicio de banda ancha móvil de alta velocidad globalmente disponible del mundo que será suministrado a través de una sola operadora de red.
En las próximas semanas, el equipo de operaciones de Inmarsat dará las instrucciones al satélite para realizar una serie de maniobras que lo llevarán a una órbita elíptica geosincrónica. De esta manera, a finales de este mes el satélite habrá concluido el despliegue de sus rayos solares y reflectores. A esto le seguirá una fase de elevación eléctrica de la órbita que llevará a la nave espacial a su órbita geoestacionaria final. Está previsto que la misma concluya a finales de marzo, a tiempo para el inicio de una prueba de carga programada para principios del mes de abril.
El Inmarsat-5 F2 fue construido por Boeing Satellite Systems International Inc. (‘Boeing’) con un diseño comprobado (702HP), y es parte de la inversión de 1.600 millones de dólares que ha hecho Inmarsat para su próxima generación de comunicaciones móviles globales de banda ancha.
El CEO de Inmarsat, Rupert Pearce, ha expresado sobre la puesta en órbita del satélite: “El lanzamiento exitoso de nuestro segundo satélite Inmarsat-5 por Proton es un paso hacia delante significativo en nuestra jornada para ofrecer el primer servicio globalmente disponible de banda ancha móvil de alta velocidad del mundo”. Asimismo, Pearce ha comentado: “Nuestro primer satélite GX entró en servicio comercial en julio de 2014, y desde entonces ha brindado un servicio excelente a nuestros clientes en Europa, Oriente Medio, África y Asia”, al tiempo que ha añadido: “Con el Inmarsat-5 F3, que se espera sea lanzado por Proton en los próximos meses, estamos a tiempo de alcanzar una cobertura totalmente global en el inicio de la segunda mitad del 2015”.