El programa “Ciudad Segura”, implementado en la capital uruguaya, ha reducido prácticamente a la mitad los delitos a través de un sistema de “vigilancia por saturación” que contempla numerosas cámaras de video HD y un software que identifica comportamientos anómalos para activar un sistema de alarma conectado a la policía.
29 de diciembre 2014.- El primer Centro de Video Vigilancia por Saturación (múltiples cámaras con visión 360°), fue instalado por el Ministerio del Interior de Uruguay, tomando como modelo los sistemas de video vigilancia del distrito de Puerto Madero, en Buenos Aires. Este sistema, implementado por SONDA, ha logrado reducir un 49% la delincuencia a nivel nacional y un 60% en el sector de Ciudad Vieja, una de las zonas turísticas de la capital.
El sistema funciona a partir de la instalación de 900 cámaras que visualizan áreas en 360° evitando puntos ciegos, instaladas en 5 zonas distintas de la ciudad y conectadas a un Centro de Monitoreo operado por 16 personas (“visualizadores”), divididos en cuatro turnos. El corazón del sistema es “un avanzado software que está instalado en los equipos de video, y que interpreta ciertos patrones que registran las imágenes y las analiza de acuerdo a conductas preestablecidas que son susceptibles de activar una alarma”, como destaca José Orlandini, Gerente Corporativo de la División de Servicio de SONDA.
El sistema es inteligente, ya que a medida que van surgiendo nuevos comportamientos sospechosos, se tipifican e ingresan en el software como un nuevo patrón. De este modo, el sistema leerá las imágenes y cuando registre una situación extraña, de acuerdo a los patrones preestablecidos se activará una alarma. Las cámaras cuentan con un sistema de reconocimiento de patentes o matrículas (License Plate Recognition), con el cual la policía hace una identificación de autos robados, mediante un tablet conectado a la base de datos del ministerio.
Por otra parte, el sistema de seguridad integra un servicio para que los ciudadanos puedan realizar denuncias de delitos como hurtos, daños y violencia doméstica, a través de internet, sin tener que desplazarse a una comisaría.
El software (el mismo que utiliza el 911 en EE.UU) está interconectado con todos los sistemas de gobierno. Los visualizadores están situados junto a los despachadores, quienes se comunican por radio con los policías que están en la calle, mediante el sistema Tetra de comunicaciones seguras.
Las cámaras están ubicadas en cada esquina, a una altura suficiente para que no sean vandalizadas y para que sean visibles para todo el mundo, de modo que sirvan como elementos disuasivos para quienes piensen delinquir. Las cámaras transmiten en Full HD con una resolución de 2 megapixeles y un alcance de hasta 40 metros para el reconocimiento facial (no automático).
El objetivo de este sistema, que podría implementarse sin problemas en Chile o cualquier otro país de la región, es minimizar los delitos, reduciendo su ocurrencia y apoyando la resolución de los delitos, ayudando a la labor de fiscales y jueces, ya que todas las imágenes quedan almacenadas automáticamente por 30 días en alta resolución.
Francisco Carrasco, CIO America Laina