Nuevas amenazas se ciernen sobre el reinado de Carlos Slim en el negocio de las telecomunicaciones en México. Primero fue la puesta en vigencia de la Reforma a las Telecomunicaciones, impulsada por el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto para desmontar los monopolios y mejorar la competitividad del sector. Y el “golpe” más reciente lo ha debido sentir con el ingreso de fuertes competidores internacionales, y que antes eran sus aliados, y que vienen a conquistar el mercado existente en ese país de Norteamérica.
Según el Diario El Economista, quien se apoya en un reporte de la Consultora IDG, en un mercado como el mexicano, donde el negocio de telecomunicaciones y tecnologías de la información debe movilizar este 2014 alrededor de $ 24.871 millones, era más que inminente la llegada de nuevos competidores o marcas al mercado mexicano.
Sorprende a dicho mercado, que uno de los principales retadores de América Móvil, que es la compañía dirigida por el empresario Slim, y que además posee cerca de 70% del mercado de ese país, sea la multinacional estadounidense AT&T, que hasta junio de 2013 era su socio y participaba con 8% de la propiedad, quien ahora quiera competir “de tu a tu”, con América Móvil.
Hasta hace unos días AT&T se daba como el fijo comprador de parte de los activos que tendrá que vender Slim para cumplir los cambios exigidos por la Reforma a las Telecomunicaciones, si quiere participar en otros negocios atractivos para el grupo estadounidense.
Sin embargo, AT&T decidió “cambiar los planes”, y el pasado viernes 7 de noviembre oficializó la compra del 100% de la propiedad en Iusacell, el tercer operador de telefonía móvil en México, cuyo propietario es el magnate Ricardo Salinas Pliego, dueño de TVAzteca, uno de los dos consorcios televisivos más importantes en México, por la suma de $ 2.500 millones.
AT&T es el segundo proveedor móvil más grande de Estados Unidos, con 110 millones de suscriptores y tiene negocios en 170 países.
La compra del operador mexicano, con cerca de 8,5 millones de clientes, le permitirá a la firma estadounidense consolidar su participación en el mercado norteamericano, de 400 millones de habitantes. Pero el vendedor de Iusacell también hace un gran negocio.
En septiembre, Ricardo Salinas Pliego, dueño de la mitad de la firma de celulares, anunció la compra del 50% que tenía el Grupo Televisa, por $ 717 millones, en un negocio que todavía está finiquitándose. En 2011 Televisa había comprado esta participación por unos $ 1.500 millones.
Televisa habría decidido salir de la empresa móvil para no inhabilitarse en un negocio que le resulta prometedor: el lanzamiento de Izzi, servicio de internet de banda ancha y telefonía por una tarifa fija y que complementa muy bien su negocio de televisión abierta y de pago, así como el de telefonía fija, donde tiene 8% del mercado.
En julio pasado algunos medios mexicanos habían especulado con una posible compra de este porcentaje por parte de la española Movistar, que tiene 20% del mercado de telefonía móvil en ese país. Pero el propio Salinas Pliego salió a desmentir las versiones a través de su twitter, según reportó en su momento CNNExpansión.
Aunque para algunas empresas pueden ser malas noticias, para los consumidores mexicanos sin duda resultan ser las mejores.
Es un reto difícil para AT&T aquí en México, ya que anteriormente quiso entrar en el mercado compitiendo con Telmex en servicios de telefonía local y larga distancia, pero no se pudo consolidar. Dejo el link para más información sobre el anuncio de Grupo Salinas por la venta del 100% de sus acciones de la telefonía IUSACELL a la transnacional AT&T: http://www.mediacorpgroup.net/app/blog/entry/37