Aunque el cómputo en la nube tiene un gran impacto positivo en los centros corporativos, hay escenarios en los que este sistema ha logrado provocar cambios visibles a la gente, desde los congestionamientos de tránsito hasta la tasa de mortalidad en niños.
Christian Klezl, vicepresidente de soluciones cloud para IBM a nivel mundial, explicó a los medios que hay distintos experimentos de ciudades inteligentes en los que se aplica cómputo en la nube y análisis de datos, en donde se determinó que es posible reducir las congestiones de tránsito 20 %, generando mejoras en la calidad del aire y de vida.
Con base en una minería de datos similar, los índices de crimen en una ciudad también pueden preverse y reducirse usando la nube.
“No es necesario construir más puentes y carreteras o implementar muchos programas de seguridad en la ciudad, solo hay que analizar los datos que ya se saben para que surtan efecto y trabajen en favor de la sociedad. Con un monitoreo en tiempo real, el índice de crimen se puede reducir entre 20 y 40 %”, dijo en entrevista a un medio mexicano.
La nube también puede beneficiar la salud. De cada 10 niños que nacen, 9 son prematuros según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Lo interesante de la nube no es la tecnología en sí misma, sino lo que puedes hacer con ella. Se pueden lograr 3 cosas: hacer procesos más eficientes y reducir costos, crear valor agregado a los datos y experiencias que ya existen, o crear nuevos modelos de negocio que antes no existían”, dijo.