Diversos son los cambios que están impactando los programas de gobierno para la identificación de sus ciudadanos. Son muchos los países que están siguiendo las más recientes innovaciones ya que lo que hasta hace poco era una tendencia, se estará transformando en normatividad, en el transcurso de los siguientes años.
Las tendencias globales que conducen a un cambio generalizado de credenciales de identidad tradicionales por credenciales de identidad electrónicas (eIDs), pues son sumamente efectivas contra los intentos de falsificación a gran escala, al mismo tiempo que permiten la flexibilidad para adoptar utilidades, enfoques y aplicaciones diversas.
El objetivo es claro: poder integrar eficiencia, seguridad y costos efectivos en documentos electrónicos, como es el caso de los pasaportes electrónicos o ePassports, ya que una de las mayores preocupaciones de seguridad, es el alto tráfico en el cruce de fronteras.
Se tiene contemplado que para 2015, el 85% de todas las credenciales emitidas al año serán credenciales electrónicas de identidad (eIDs) y los países que las emitirán excederán en cuatro veces el uso de las credenciales de identidad adicionales. Lo anterior es de acuerdo con un reporte reciente de la firma Acuity Market Intelligence. Estas estadísticas enfatizan nuestros propios hallazgos basados en más de 20 años de experiencia en los más importantes proyectos de identidad gubernamentales enfocados a la ciudadanía, incluyendo 28 programas de pasaporte electrónico y 49 programas de credenciales electrónicas de identidad que van desde el ámbito nacional, hasta los programas de residentes extranjeros, identificación de servicios de salud para los trabajadores y programas de registro vehicular.
En el caso de los pasaportes electrónicos son documentos que han ido impulsando gradualmente el nivel de seguridad y funcionalidad hacia nuevos límites, brindando beneficios como una mayor conveniencia y ahorro de tiempos dirigidos a los ciudadanos y viajeros. La creciente adopción de accesos electrónicos – o puertas automatizadas con funciones de control de acceso en las fronteras -, ya se encuentran en operación en más de cuarenta aeropuertos de Europa y Asia. Esto era una tendencia y poco a poco se ha ido transformando en una medida de seguridad centrada en el ciudadano, la cual permite a los viajeros pasar a través de dichas puertas en segundos, reduciendo significativamente los costos de tener gente dedicada a revisar las identificaciones de los pasajeros.
Pasaportes electrónicos: Factores clave para su longevidad
Para que los pasaportes electrónicos puedan representar realmente una herramienta eficaz de protección, identificación y atención al ciudadano, deben contar con elementos que los hagan totalmente seguros, sin la posibilidad de ser falsificados, objetos de fraude o manipulados y que dichos elementos sean de una alta durabilidad, al mismo tiempo que traen integrada la más alta tecnología.
Para que el pasaporte electrónico se transforme en una norma, debe cumplir con importantes aspectos de diseño, basarse en estándares internacionales, así como una alta funcionalibilidad y durabilidad.
Uno de los elementos más importantes es la durabilidad ya que los documentos de identidad modernos deben estar listos para soportar la tensión, diferentes tipos de intentos de alteración física, el descuido en el manejo, así como soportar las condiciones climatológicas más adversas. En este sentido, el material que cumple cabalmente con estos requerimientos es el policarbonato, material que se ha ido ganado la confianza de los gobiernos por su alta resistencia a la manipulación.
Los documentos electrónicos construidos con policarbonato son más fuertes que los hechos con cloruro de polivinilo (PVC). Sus características principales incluyen la extrema robustez, flexibilidad y fortaleza del policarbonato y sus capacidades son ideales como plataforma de soporte para las características ópticas de muy alta calidad e impresión de alta seguridad.
El uso de este material, más la incorporación de tecnologías múltiples y las características de seguridad dentro de una sola plataforma de identidad de capas requiere de una considerable experiencia en la laminación de estructuras complejas y la apropiada aplicación de diversos materiales.
Los pasaportes electrónicos están incorporando estos nuevos materiales y añadiendo elementos tales como identificación por radio frecuencia (RFID), procesadores con o sin contacto, medios de seguridad óptica, biométricos, entre otros. La flexibilidad del policarbonato – y patentes de HID Global, como la tecnología contra prevención de grietas – ha permitido proteger la integridad estructural del documento, al mismo tiempo que cumple con las legislaciones internacionales.
La integración de estas tecnologías no es reciente, pues credenciales como la Green Card de Estados Unidos, están basadas en estos avances. Documentos electrónicos de alta seguridad como estos pueden desempeñar diversas tareas incluyendo el control de acceso, prueba de identidad, identificación para servicios de salud y recaudación de impuestos, entre otros.
El cambio de documentos tradicionales de papel a los documentos electrónicos, la integración de una o más tecnologías dentro de las credenciales inteligentes y la innovación de la industria acerca de la durabilidad física se están combinando para crear el pasaporte electrónico del mañana, a prueba de futuro. Los retos de durabilidad y de actualización de los documentos avanzados están siendo abordados con soluciones como la capacidad integrada de almacenamiento para datos personales, la integración con las bases de datos centrales para mantener la circulación de la información, incluyendo las actualizaciones después de la emisión de la credencial y mejorando la estructura física para asegurar la longevidad.
En los próximos cinco años veremos un nuevo enfoque en la mejora de la funcionalidad de los documentos electrónicos como el ePassport, respaldado en tecnologías múltiples, con una cada vez mayor integración en el diseño de tarjetas, sistemas de emisión y distribución y la fabricación. Estos y otros factores convertirán el concepto de pasaportes electrónicos, con duración de diez años o más, en la realidad del mañana.
Por Jorge Castrillo, Director de Soluciones de Identidad para Programas de Gobierno de HID Global