Para el mundo tecnológico y empresarial, el concepto de Nube ya se convirtió en algo intrínseco de casi toda organización.
Sin embargo, esta nueva herramienta que encuentra excelente recepción y se extiende a pasos agigantados puede llegar a desorientar a todos aquellos que no estén familiarizados con el tema. ¿Qué es la nube? ¿Qué beneficios puede obtener una empresa a partir de su aplicación?
Hasta ahora, la utilidad más difundida se dio en el ámbito privado: de a poco, los usuarios dejan de utilizar dispositivos de almacenamiento externo y comienzan a migrar hacia la nube. Diversas opciones como Dropbox o Google Drive comenzaron a ofrecer interesantes capacidades de almacenamiento que potenciaron su popularidad, ya que permite acceder a la información desde cualquier lugar. En el ámbito empresarial, sin embargo, las posibilidades que ofrece la nube se multiplican de una forma asombrosa.
El principal desafío en este sentido se resume, entonces, en cómo escalar la infraestructura y mantener disponibles todas las aplicaciones del negocio buscando una relación de costos más eficiente. Es así que empresas como Baufest, una proveedora argentina de servicios y soluciones de IT a nivel internacional, buscan día a día mantenerse a la vanguardia para ofrecer a sus clientes lo último del mercado.
“El contexto en el que vivimos demanda que las Tecnologías de la Información (IT) se reinventen constantemente para satisfacer la demanda de los consumidores”, expresó
Pablo Rodríguez, Gerente de Unidad de Servicios de Baufest. “Implica no solo entender cómo administrar el equipamiento físico, sino también el proceso de virtualización y automatización”, destacó Rodríguez. De esta cuestión deriva el concepto de Cloud Computing, que implica un cambio vertiginoso en el tradicional modelo de las empresas.
El término puede sonar algo confuso, pero no lo es para los profesionales que ya lo incorporaron como algo natural. La nube constituye un nuevo modo de adquirir y suministrar servicios que se centra en la experiencia de consumo del usuario. “No solo está fuertemente vinculada con el self-service, sino que también se caracteriza por su agilidad y elasticidad”, agregó Rodríguez. “Es un modelo usage-base y on-demand al mismo tiempo; es decir que se paga únicamente por lo que usa y permite crecer de manera escalonada.”
Existe una nube para cada necesidad. Por un lado, la nube privada cuenta con una infraestructura propia o alquilada en forma exclusiva por la misma organización. La nube pública, por otro lado, se basa en estructura de una compañía privada que cobra a los usuarios en base al uso y es compartida por múltiples clientes. Y finalmente tenemos la nube comunitaria, que posee una infraestructura compartida por múltiples organizaciones asociadas a una comunidad con objetivos comunes.
La penetración del cloud computing continúa extendiéndose y se orienta cada vez más a las necesidades de cada consumidor particular. Así, en el mundo empresarial, las múltiples posibilidades que ofrece la nube la convierten en una herramienta fundamental.