Un informe del Departamento de Defensa de Estados Unidos acusa directamente a China de estar detrás de los ciberataques. Con esta acusación formal, se incrementa la tensión entre los dos países por el ciberespionaje.
De esta forma, la conclusión a la que ha llegado el Pentágono, que se encuentra en un informe anual de evaluación de las capacidades militares de China, incrementa la tensión entre los dos países, los cuales se han acusado mutuamente de estar detrás de prácticas de ciberespinoaje.
El informe asegura que durante el año pasado “numerosos sistemas informáticos en todo el mundo, incluidos los de propiedad del gobierno norteamericano, continuaron siendo objeto de intrusiones, algunas de los cuales parecen ser atribuibles directamente al gobierno y los militares chinos. Estas intrusiones se centraron en obtener información confidencial y de alto valor”.
La información robada es útil para muchas entidades chinas, entre las que se incluyen las industrias de tecnología de defensa, el ejército, los responsables de Estados Unidos en China y sus capacidades militares.
El Pentágono considera que las capacidades de guerra cibernética de China podrían utilizarse para complicar la respuesta norteamericana en caso de enfrentamiento militar, lo que provocaría una capacidad de respuesta más lenta al restringir la comunicación y las actividades comerciales del adversario.
Por su parte, China ha negado estar detrás de los ataques y de las campañas de hacking coordinadas. A pesar de estas negaciones, firmas de seguridad, así como Google, han señalado a China como responsable de los ciberataques.
El Pentágono, además, destaca que tanto Rusia como China están jugando “un papel disruptivo” en los foros internacionales destinados a establecer medidas de confianza y transparencia en el ciberespacio. Cabe recordar que tanto Rusia como China están promoviendo un Código de Conducta de la Seguridad de la Información, normativa que daría a los Gobiernos autoridad soberana sobre el contenido y la información en Internet.
Cruce de acusaciones
El pasado mes de marzo el Ministro de Exteriores de China, Yang Jiechi, hizo un llamamiento a la cooperación internacional, negó la participación de su país en los ciberataques y señaló a otros países como los responsables. Un día después, Tom Donilon, asesor de seguridad nacional de presidente de Estados Unidos Barack Obama, instó a China a parar los ciberataques por el bien de las relaciones económicas de los dos países.
Asimismo, Tom Donilon aseguró que Estados Unidos va a adoptar una serie de medidas que protejan a su economía de los ciberataques, ya que las empresas estadounidenses están muy preocupadas por el robo de información confidencial y de su tecnología que se pueden producir “a través de las intrusiones cibernéticas llevadas a cabo por China a una escala en la que no hay precedentes”.
En febrero, la firma de seguridad estadounidense Mandiant acusó a una unidad militar china de estar detrás del robo de información a, al menos, 141 empresas desde 2006.