Muchos medios de comunicación supuestamente conocedores de la tecnología han publicado en los últimos días noticias verdaderamente irresponsables, sobre el singular crecimiento de BITCOIN y el cruce milagroso de la barrera de los mil millones de dólares.
La supuesta legalidad o normalización de esta moneda solo ha servido como cortina de humo para tapar lo verdaderamente grave.
Este milagro de moneda virtual que se valoriza por razones ajenas a cualquier lógica de mercado, es utilizada para facilitar las transacciones ilegales que ocurren hoy en día en la Deep Web, y que nos afectan a todos como sociedad responsable, sin importar a donde viva cada lector.
Internet está formada por 2 tipos de páginas de información la Web Superficie que comúnmente todos accedemos por Google u otro buscador y la “Deep Web”.
LA SUTIL DIFERENCIA ENTRE DOS MUNDOS
En la Web de la superficie tal como la conocemos, podemos iniciar una búsqueda sobre la teoría de la relatividad y terminar en una receta de cocina para preparar una paella a la valenciana. El hecho es que siempre terminaremos en una página determinada, porque esta página puede ser indexada por un motor de búsqueda, y esto representa el 5% del total de información que existe en la web.
La Deep Web, Deepnet, Dark Web o Hidden Web es totalmente distinta, no hay motores de búsqueda que indexen el contenido al que vamos a acceder, (ciertos facilitadores exclusivos), el usuario debe estar al tanto la web que va a visitar, la cual muchas veces tiene una sólida contraseña de acceso, muchas otras sin los scripts obligatorios para poder ver apropiadamente el contenido.
Estas páginas generalmente se las nombra con un pseudo-dominio .onion genérico que indica una dirección IP anónima accesible por medio de la red Tor. Aunque tales direcciones no son en realidad DNS, los buscadores web pueden correr sobre sitios .onion usando programas proxy y consignando la solicitud a través los servidores de la red Tor.
El sentido de utilizar este sistema es que tanto el proveedor de información como el destinatario sean difícilmente trazables, ya sea entre ellos, o por una tercera persona.
Las direcciones con el pseudo-dominio .onion son turbias, no soportan las reglas mnemotécnicas habituales y nacen de una combinación de 16 caracteres alfanuméricos compuestos deliberadamente en el soporte de una clave pública cuando Tor es configurado.
Esa mixtura de 16 caracteres puede llevar consigo cualquier letra del alfabeto y/o dígitos decimales que empiecen por 2 y acaben en 7 representando así un número de 80-bit en base32.
El nombre “onion” hace referencia a la técnica de encaminamiento de cebolla, en inglés onion routing, usada por Tor para lograr un alto grado de anonimato.
¿Qué ofrece la Dark Web que no figure en Google?
En la Deep Blue hay tráfico de personas, de niños, pedofilia al por mayor. También manuales de para robar bancos, de guerrilla, sobre cómo hacer C4, o una bomba de radioactiva con desechos hospitalarios, procedimientos para envenenar, asesinar, ocultar rastros, hackear, lavado de dinero, venta de órganos, compra de artículos robados, narcotráfico, sicarios, nazismo, venta de órganos, armas de guerra, ect.
Se caracterizan las URL de la Dark Web por:
Son un conjunto de archivos llamados No textuales, es decir archivos multimedia, gráficos, software, y documentos en Portable Document.
Tener la extensión .onion identifica a los archivos de la DeepWeb (en contraste con los sitios de la “superficie” que terminan en .com)
Esto determina el contenido de bases de datos accesibles a través de web: se trata de información estructurada en tablas de datos creados y manejadas con programas como: SQL Server, MySql, Access, Oracle.
La mayor parte de las transacciones en la Deep Web son llevadas a cabo mediante las Bitcoins.
Comprar BITCOINS no es un delito, pero seguramente nadie quiere ser identificado como comprador de la misma moneda que usan pedófilos, delincuentes y asesinos.
Marcelo Lozano
Director de CIO AMERICA LATINA