Los responsables de protección de datos de la Unión Europea han encontrado incorrecciones en las políticas de Google después de una investigación de las mismas.
A principios de este año Google anunciaba un importante cambio en sus políticas de privacidad. La compañía simplificaba y unía las políticas de sus distintos servicios en un único acuerdo con los usuarios. Desde Google explicaron que se trataba de un intento por facilitar a los usuarios la comprensión del contrato adquirido al usar sus servicios. Sin embargo, los reguladores europeos no coincidieron con la visión de Google.
En concreto, el responsable de privacidad de Francia anunció una investigación sobre las nuevas políticas de la compañía. A dicha investigación se han sumado otros reguladores europeos, hasta hacer que toda la Unión decida analizar las políticas de Google. Después de un primer anuncio negativo sobre sus políticas de privacidad, Google respondió con una declaración de 94 páginas, pero los reguladores no han quedado satisfechos y ahora exigen a Google cambios para cumplir las normativas vigentes.
En concreto, según Reuters, los reguladores de la Unión Europea han enviado un comunicado a Google exigiendo cambios en su política de privacidad. Parece que la UE ha encontrado problemas legales en el contrato de Google con los usuarios y las recomendaciones están encaminadas a subsanar dichas deficiencias.
Desde Reuters han explicado que en su escrito, la UE ha incidido en la necesidad de que Google detalle sus intenciones y métodos a la hora de captar y procesar la información de los usuarios en sus distintas cuentas. Además, para la UE Google debería simplificar los avisos de privacidad y hacer que sean más sencillos de comprender. En su escrito, los reguladores han destacado que “combinar datos personales a una escala tan grande crea altos riesgos de privacidad para los usuarios”, por lo que la nueva política de privacidad no sería positiva.
La ampliación de la información a los usuarios y la simplificación de la misma son las premisas básicas de la petición de la UE a Google. Por el momento no se sabe si dichas sugerencias tendrán un plazo de ejecución o sus consecuencias, ni la posición de la compañía.