Esto parece un funeral tecnológico. “Se hace tarde”, les dice Microsoft a los clientes que no han empezado a migrar a Windows 7, y la empresa de Redmond, ha comenzado lo que denomina “dos años de cuenta atrás” para la desaparición de Windows XP, su sistema operativo más longevo.
Tanto Windows XP como la suite de productividad Office 2003 dejarán de tener soporte el 8 de abril de 2014, según una portavoz de la compañía. En esa fecha, la compañía detendrá las actualizaciones de seguridad para ambos sistemas que comenzaron su andadura en 2001 y 2003, respectivamente.
“Las dos versiones eran de gran calidad en su momento, pero el entorno tecnológico ha cambiado”, asegura Stella Chernyak, directora de marketing en Microsoft.
Ésta no es la primera vez que la compañía urge a sus clientes a renovar su software y quizás también sus PC, para renovar sus herramientas. En junio del 2011, un directivo de la compañía ya advirtió de que era el momento de migrar de Windows XP, e incluso otro de sus responsables dijo a principios de este año que XP era el “menor denominador común”, para explicar por qué este sistema operativo no podría correr Internet Explorer 9.
En los últimos doce meses, XP ha perdido cerca de 10 puntos porcentuales de cuota de mercado, según la consultora de mercado Net Applicatons. Según indican sus datos, algunos PC seguirán utilizando Windows XP cuando Microsoft retire el soporte.
El analista de Gartner, Michael Silver también es de esta opinión y ha asegurado que “el 16,5% de las organizaciones dice que tendrán más de un 5% de usuarios XP, cuando finalice el soporte de Microsoft”.
En la web de la compañía ya figuran comentarios al respecto de esta cuenta atrás y se advierte que “si tu organización no ha comenzado la migración a una PC moderna, llega tarde”. De hecho, los datos de Microsoft indican que una compañía media invierte entre 18 y 32 meses en completar sus programas de migración de sistemas operativos.
Gregg Keizer, Computerworld