En este fin de semana, festejamos un nuevo aniversario del día 3,14 en recuerdo de Albert Einstein, en virtud de ello, CIO América Latina y Microsoft Research unen fuerza para presentar a nuestros lectores una serie de notas, que rescatan el pensamiento de este físico genial que influyó de forma determinante en el pensamiento moderno de nuestros científicos y hombre de ciencia.
Para definir la mano de obra ocupada en los sectores de la creación, la innovación, y el conocimiento, daría la impresión que esta casta creativa está abandonando las grandes metrópolis para reubicarse en áreas que le resultan más interesantes “buscando el nirvana de los servicios y experiencias de calidad, la existencia pasividad ante cualquier tipo de diversidad y, fundamentalmente, coyunturas para fortalecer la identidad como individuos creativos “. Algunos pensadores lo llaman teoría como la de las tres T: Talento, Tolerancia y Tecnología.
Algunas ciudades en el mundo, han determinado un conjunto de indicadores y parámetros para medir el mayor atractivo de un lugar sobre otro, para atraer mentes brillantes y cambiar el perfil económico de una ciudad. Si consideramos que vivimos en la Economía del Conocimiento y consideramos que el talento humano es el principal activo de una sociedad, la medida se tiñe de un sentido común inobjetable.
Esta serie normas plantea registrar una cantidad de industrias de alta tecnología, crear un índice “per capita” de patentes que conlleven innovación, el nivel de tolerancia social a las parejas homosexuales que viven en la ciudad y la relación de estas situaciones con los medios informativos, la cantidad de artistas creativos y sitios para exponer estas expresiones, el nivel de personas que completaron estudios secundarios y terciarios, los extranjeros que viven en la ciudad.
Del cruce de estos guarismos surge un indicador que es un verdadero barómetro sobre la diversidad y la creatividad.
Si bien esta valoración puede tildarse de “americana” en el sentido estadounidense, existen cuestiones locales para América Latina que ponen a prueba conceptos evidentemente sociales que portan valor, tales como el nivel de exclusión y el respeto a los pueblos originarios.
Esta nueva forma de mirar a una ciudad –es muy interesante- considerando como valioso un entorno abierto a las innovaciones culturales como condición decisiva para que pueda surgir la clase creativa, además de las ya previsibles sobre la formación, industrias de alta tecnología y patentes de innovación.
Sin dudas los altos niveles de violencia existente en las ciudades latinoamericanas, son el reflejo de las asimetrías que provoca las anomalías en los parámetros citados.
La transformación de un sistema educativo flexible, capaz de sumar un número importante de horas cátedra de ciencias duras, mayor foco en el uso de reglas creativas, que puedan generar mayor permeabilidad social dando capacidad de transformar los mecanismos de pensamiento de cada individuo.
Todas estas ciudades serán un punto de atracción para la inmigrantes, y precisamente las corrientes inmigratorias serán aceleradas y sumarán valor a la cultura global; todas estas ciudades alcanzarán altas expresiones de la cultura, en manos de la burguesía, aunque el público, los actores, los creativos, a menudo serán inmigrantes recientes. Vamos a presenciar el surgimiento de nuevas urbes cosmopolitas.