El sector logístico es uno de los que más y mejor de ha transformado digitalmente. Esto lo hace blanco de ciberataques crecientes.
Sólo en este sector, se estima que los costos pueden superar US$ 10,5 billones y que imponen en desarrollo de una ciberseguridad 2.0.
En una región como América Latina, las distancias que deben recorrer los productos son colosales. Y mucho de las mismas se recorren por tierra.
Por ello, el monitoreo tanto de las flotas como de sus cargamentos han supuesto una acelerada transformación digital, con múltiples beneficios por las empresas de transportes, fabricantes y consumidores.
No obstante, el precio que la industria logística ha tenido que pagar por las ventajas de la digitalización es exponerse a ciberataques, cada vez más frecuentes, sofisticados e increíblemente costosos.
En este sentido, las cifras son más que preocupantes. Sólo en 2023, el costo medio de una violación de la seguridad de los datos fue de US$ 4.45 millones.
Más grave aún es el hecho de que, para 2025 se espera que el costo total de las violaciones de la ciberseguridad en todos los ámbitos llegue a casi US$ 10.5 billones (millardos en numeración hispana).
“Si bien la digitalización aporta ventajas, la transformación dinámica de los sistemas puede dejar de lado algunos factores de defensa”, afirmó el CEO de DHL Global Forwarding en Sudamérica, Alberto Oltra.
Para el ejecutivo, algunos de los factores que crean lagunas para los ciberataques son:
- Los servidores obsoletos
- La ausencia de parches
- Y las brechas de conocimiento entre los empleados equivalen a grietas en la infraestructura TI