El cambio de la ciudad de Múnich a software open source ha sido completado exitosamente, con la gran mayoría de los usuarios de administración pública ejecutando su propia versión de Linux.
En uno de los principales despliegues de software open-source en Europa, la ciudad migró de Windows NT a LiMux, su propia distribución de Linux. Asimismo, la ciudad decidió utilizar el formato ODF (Open Document Format) como estándar, en lugar de otras opciones de proprietarios.
Diez años después de la decisión inicial de hacer el cambio, el proyecto LiMux comenzará a operar regularmente, de acuerdo a un documento publicado en el sitio web de la ciudad.
Múnich ha ahorrado más de 16 millones de dólares gracias a la transición, aunque el costo no fue la única razón para hacer el cambio. También era importante depender cada vez menos de los proveedores, ciclos de productos y sistemas operativos de propietarios.
Christine Strobl, alcalde de Múnich, dijo que con el éxito del proyecto, la ciudad ha tomado un paso importante hacia una mayor apertura e independencia de los proveedores de software individuales.