Hoy en día existen muchos productos que están marcando la pauta en la tendencia de la ropa tecnológica, como Google Glass, Galaxy Gear de Samsung, Pebble y Nike+, pero la categoría abarca mucho más.
Los analistas, vicepresidentes, representantes de desarrollo de productos y expertos en el tema que hablaron en MobileCon 2013 predicen que la ropa tecnológica se convertirá muy pronto en parte de nuestra vida personal, tanto como los teléfonos inteligentes y las tabletas.
Redg Snorgrass, cofundador de Stained Glass Labs, opina que el mercado de ropa tecnológica se divide en tres áreas: lentes, relojes y ropa, y opina que la nueva industria se enfrenta a los mismos retos que los teléfonos inteligentes tuvieron que afrontar cuando fueron lanzados al mercado.
La única diferencia es que Apple no está a la delantera. Samsung es el líder en esta nueva industria, por lo que Apple quedará relegado al lugar de seguidor.
La mayoría de los panelistas están de acuerdo en que al menos por unos años, la tecnología utilizable llegará en forma de dispositivos complementarios diseñados para trabajar en equipo con un smartphone.
Un gran problema al que se enfrenta a ropa tecnológica es la duración de la bateria. Justin Butler, representante de Misfit Wearables, opina que no deberíamos medir el tiempo de batería en días, sino en meses.
Otro problema es que los dispositivos requieren más energía cuando obtienen funcionalidades más avanzadas, por lo que la tecnología de administración de batería debería evolucionar constantemente.
La siguiente barrera es la adopción, ya que muchos de los usuarios consideran que este tipo de dispositivos son molestos al usarse y no son duficientemente discretos.
Myriam Joire, representante de productos de Pebble opina que, desde el punto de vista estético, alguna compañía debería hacer por la ropa tecnológica lo que Apple hizo por los teléfonos inteligentes.