Todos estamos conscientes de los grandes beneficios que el big data puede aportarle a nuestra empresa. La posibilidad de aislar pequeños fragmentos importantes dentro de grandes volúmenes de información estructurada y no estructurada puede permitirnos mejorar el servicio al cliente, disminuir costos y realizar procesos de maneras más eficientes.
La adopción del big data aún se encuentra en las primeras etapas, pero esto podría cambiar rápidamente, a pesar de que las empresas que planeen implementar esta tecnología se enfrentan a varios problemas.
Lograr que una iniciativa de big data despegue puede ser uno de los pasos más difíciles, dado que el equipo de TI y el resto de la empresa puede tener metas muy distintas. Es necesario conectar las necesidades de la compañía con los esfuerzos del equipo de TI para poder lograr obtener resultados exitosos.
Es muy difícil encontrar al personal adecuado para llevar a cabo este tipo de proyectos, ya que se requieren de habilidades específicas para implementarlo correctamente. El área está creciendo cada vez más, pero aún así es necesario hallar especialistas con entrenamiento en econometría, matemáticas y estadística. Asimismo, el personal debe estar capacitado para programar en entornos modernos y tener un sentido de los negocios, ya que se necesita interpretar el contexto en el que se presenta la información y no sólo los resultados.
Analizar big data requiere de pensamiento inductivo. Es necesario utilizar información para crear conexiones probables. Esto es algo que la mayoría de los equipos de TI no está acostumbrado a hacer, ya que su razonamiento suele ser deductivo.
Otro problema al implementar big data es la gobernancia. Cuando una compañía comienza a analizar cantidades prácticamente interminables de información existe el riesgo de descubrir cosas que sería mejor mantener escondidas. El big data responde preguntas que no han sido formuladas, por lo que es necesario crear un “sandbox” que permita contener la información que sería mejor mantener en secreto.
A pesar de los grandes beneficios que podría proporcionarnos esta nueva tendencia, hay que tener en cuenta que el big data aún es un diamante en bruto.