Microsoft vislumbra un nuevo futuro para Office, donde la productividad debe ser una experiencia compartida. Ahora, la próxima suite de Office podría integrar nuestros círculos sociales a las hojas de cálculo, documentos de Word, y presentaciones.
Imaginemos que podemos reunirnos con nuestros compañeros de trabajo desde cualquier lugar en el que nos encontremos, sacando el máximo partido a su Office para mejorar sus resultados. Ese es el futuro que vislumbra Microsoft para su suite de Office y que ninguno de sus competidores ha llegado siquiera a imaginar, Google incluido.
La futura versión de Office 365 tendrá una evolución con respecto a la aplicación de usuario individual actual, será un entorno de trabajo compartido. Sí, Office puede ayudar a usuarios clásicos con documentos tradicionales, pero en esta nueva visión en grupo el valor de Office aumenta al ritmo que lo hacen los usuarios conectados. Y el resultado puede resumirse en cuatro palabras, contexto en tiempo real.
Esta evolución de Office corre en paralelo a lo que están haciendo los navegadores, moviéndose desde la obligatoria búsqueda de información hacia el suministro de datos, antes de que el usuario los solicite. Lo hemos visto en Google Now y en el asistente digital Cortana de Microsoft. Y Office llevará esta idea más lejos.
Hace apenas unos meses, Microsoft sugería que los documentos podrían mejorarse con datos en tiempo real. Ahora, parece que su idea es aprovechar la sobreabundancia de los mismos en las redes sociales, tipo Yammer, Lync y Skype.
Su primera materialización la hemos visto en Office Graph, similar, al menos la idea, a Facebook Graph, que aprovecha las relaciones que han forjado los usuarios en Facebook.
Microsoft quiere hacer algo similar, tomar información de las relaciones entre usuarios, grupos y conversaciones, mantenidas vía Exchange Online, SharePoint Online y Yammer, para proporcionar información contextual cuando sea preciso.
El primer ejemplo es “Oslo”, llamado así por la ubicación del equipo de FAST, compañía adquirida por 1.200 millones en 2008 que, según Microsoft, “buceará” entre los datos más destacados del usuario, sus conversaciones clave, el contenido y personas que más nos importan. En las explicaciones de Microsoft, parece como si Oslo fuera una aplicación independiente, o meta-herramienta, que reuniría los tres productos mencionados.
En todo caso, parece que la línea que trata de dibujar Microsoft se podría cruzar con LinkedIn. Oslo también podría convertirse en un administrador de relaciones avanzado, ya sea como una herramienta interna o para interactuar con clientes y socios.
Este es el enfoque que Microsoft propone para su próxima generación de su suite de productividad.
Francisco Carrasco, CIO America Latina