La revolución tecnológica en el segmento móvil ha derivado en nuevos modelos de negocios, como el caso de los operadores virtuales de telefonía móvil o MVNO (por sus siglas en inglés).
Los operadores virtuales son empresas dedicadas a ofrecer servicios de telecomunicaciones móviles bajo su propia marca, la cual puede contar con una estructura de precios, oferta de equipos y servicios, además de centros de atención a clientes especializados.
Estas empresas, a diferencia de los operadores tradicionales, no cuentan con infraestructura ni redes propias, dependen de un convenio para la compra de servicios por volumen.
Además no necesitan invertir grandes sumas para crear infraestructura de redes, ni destinar largos periodos de tiempo para su implementación. Para operar únicamente necesitan el permiso de la autoridad correspondiente, que no implica las dificultades de una concesión por espectro, y llegar a un acuerdo con algún operador para comprar capacidad y así ofrecer sus propios servicios.
Los operadores virtuales son un modelo efectivo para aumentar la competencia, su incursión en un mercado con elevada concentración no genera un cambio radical en términos de participación de Mercado, pero sí permite un aumento de la competencia a través del aumento en la oferta de servicios.
En México, por ejemplo, existe una gran oportunidad de negocio para los MVNO, pues la adopción de servicios móviles sigue una tendencia creciente entre la población y estos pueden atajar segmentos de nicho con ofertas estratégicamente diseñadas para consumidores específicos.
Tal es el caso de empresas como Maxcom y Megacel, de Megacable, quienes ofrecen servicios de telecomunicaciones móviles bajo la modalidad de cuádruple play.
Asimismo, la marca Virgin Mobile Latin America tiene el objetivo de acceder al mercado móvil regional con una propuesta enfocada al público de entre 15 y 30 años, a fin de posicionarse en la industria como una alternativa fresca, con transparencia y sencillez de precios.