Se trata de los resultados de una encuesta realizada entre 200 analistas de malware corporativo en Estados Unidos y sus conclusiones indican que, entre los problemas que debe afrontar un analista de malware, destaca la visita a webs pornográficas, en un 40 por ciento de los casos.
No obstante, éste no es el mayor peligro para los sistemas de las empresas. Los ataques de phishing, por pinchar en un enlace falso remitido vía correo electrónico, siguen siendo los más numerosos (56 por ciento).
Otros errores comunes son conectar un dispositivo ya infectado a un PC de la empresa (47 por ciento), permitir que otro miembro de la familia utilice el ordenador del trabajo (45 por ciento), las citadas webs pornográficas, y la instalación de una aplicación contagiada (33 por ciento).
“Los resultados ponen de relieve los problemas que los expertos en seguridad deben afrontar y no solo externos, sino también provocados por los propios directivos de la organización”, relata el estudio.
Estos datos no implican, sin embargo, que el 40 por ciento de los directivos estadounidenses vean pornografía, sino que los expertos encuestados afirmaron haberse encontrado con problemas derivados de visitar webs porno, en algún momento de su carrera.
Pero hay otros datos preocupantes en el informe, como que más de la mitad de los analistas encuestados aseguraron haber afrontado un fallo en la seguridad de los datos de una empresa, y que no lo comunicaron ni a clientes ni a socios.
Entre las quejas más frecuentes de estos profesionales de la seguridad, figuran la falta de eficacia de las soluciones antimalware (58 por ciento) y la escasez de personal cualificado (40 por ciento) para luchar eficazmente contra los ataques cibernéticos. Además, el 21 por ciento de los encuestados mencionó el escaso apoyo directivo a su labor y el 18 por ciento aludió a la falta de presupuesto suficiente para realizar su trabajo.
Dave Jeffers, IDG News Services