Los esfuerzos por evitar lo que podría ser un mal presente en la región no han evitado el avance de una Ley que regulará a Uber y otras apps de transporte.
CIO AMÉRICA LATINA | Por Elibeth Eduardo | @ely_e
La acción, perfectamente podría replicarse en Argentina (país que no ha permitido el ingreso de la aplicación para proteger a las empresas de taxis), Colombia y hasta en España como medida para contener los cada vez más fuertes conflictos que generan startups, el escenario está lejos del estadounidense “dejar hacer” que también le ha funcionado a Uber y demás aplicaciones de transporte “colaborativo”.
Según un reporte de la agencia Reuters, de alguna manera, Uber, Cabify, Easy Taxi y algunas otras aplicaciones de transporte con un modelo de negocio “colaborativo” pueden respirar tranquilas sin embargo: la ley aprobado deberá ser devuelta a la Cámara Baja para algunas correcciones.
¿Por qué? Porque el Senado brasileño estimó que, tal como le fue presentada por los diputados, la legislación sofocaría el negocio asociado a estas plataformas y, con ello, perjudicando a más gente de la que estaría beneficiando.
¿Esquivó una bala?
Aún no hay detalles de las modificaciones que la Cámara Baja tendrá que hacer, es claro que el proceso de regulación que parecía inminente va a demorar un poco más de lo previsto.
Quizás, inclusive, no llegar en mucho tiempo si la discusión se “estanca” entre ambas cámaras. Es claro además que el proceso de “cabildeo” de los sectores enfrentados se intensificará y, quizás, sean los usuarios y las impactos sobre el empleo los que terminarán decidiendo.
Aunque, en apariencia, Uber y sus similares han esquivado (otra vez) una bala, la disposición de regular el servicio no va a desaparecer y debería ser incorporado en los costos transaccionales, pensando en sus accionistas.
Es sólo cuestión de tiempo antes de que se le pongan límites a sus libertades y el tema de las condiciones de sus trabajadores se haga más álgido.