Gamers ahora disponen en Latam de SSD más fría
El impacto de la pandemia en los requerimientos de conectividad ha permitido que la fibra óptica muestre un despliegue casi sin precedentes.
Los gobiernos lo han propiciado, quizás frente a los retrasos y requerimientos de la BAM.
En algunos países, la pandemia para las empresas se mostró abiertamente como una oportunidad para recuperar – rápidamente – cualquier inversión que se realizara
Tal es el caso de la región zuliana en Venezuela, fronteriza con Colombia y hoy con la mejor velocidad de ambos países.
Lo cierto es hoy, como nunca, la fibra óptica va desde grandes empresas hasta el escritorio de casa, gracias a un potencial de crecimiento muy alto, por lo que es sinónimo de innovación y una inversión tecnológica preparada para el futuro.
No obstante, el mercado debe enfrentar además de los retos de la penetración y el crecimiento, los desafíos que suponen comenzar a implementar las redes 5G.
Pero, ¿qué beneficios tiene la fibra óptica por sobre las otras tecnologías? y ¿por qué los gobiernos la propician?
Smart cities en la mira
Lucas Samyn de Furukawa Electric LatAm señala que, durante la última década, la fibra óptica se ha consolidado como la principal alternativa de conectividad de alta velocidad para soportar el crecimiento de la transmisión de datos, voz y video, tanto para los hogares como los negocios.
Coincide con otros especialistas en que este es el material ideal para lograr el alto rendimiento reclamado por 5G, ya que proporciona más de 1K veces más ancho de banda que un enlace de cobre, por ejemplo.
La falta de alternativas y la demanda general de fibra óptica harán que este segmento de la industria del cable sea cada vez más atractivo para la inversión en América Latina.
Tal hecho ha propiciado que hoy existan altas y fuertes inversiones que empresas y gobiernos realizan alrededor del mundo.
De hecho, las implementaciones en fibra óptica representan hoy el elemento clave para la infraestructura tecnológica que consolidará la Internet de las Cosas (IoT) y las ciudades inteligentes, bajo el marco de la era de la digitalización y el Big Data.
